A finales de febrero el control de acceso que ha sido diseñado para el Centro Histórico de Málaga entrará en funcionamiento. Ya desde noviembre del año pasado fueron colocados los primeros pivotes en la calle Molina Lario
que se encuentra en el área municipal de Movilidad que forman parte del proyecto de vigilancia de los autos que accedan a las calles más céntricas. Entre éstas se encuentra la calle Comedias que cuenta ya con el primero de los postes con interfonos que permitirá a los automóviles el acceso al aparcamiento, una vez que hayan solicitado la entrada al área de circulación que se encuentra restringida. El sistema, además del interfono, contará con un sistema de reconocimiento de matrículas a través de cámaras y bolardos retractiles que abrirán paso a los automovilistas que hayan obtenido autorización. Se prevé que para finales de este mes quedará terminada la instalación de todos los dispositivos y se habrán hecho las pruebas necesarias para verificar el adecuado funcionamiento de éstos.
Los bolardos, a cuyo cargo se encuentra el área de Movilidad, serán colocados en cuatro puntos de entrada en las calles Cisneros, Nosquera, Méndez Núñez y Sancha de Lara. Con respecto a la entrada de la Calle Císter, aunque sí contará con videovigilancia para grabar las matrículas no contará con pivotes, por lo que a través de las grabaciones se conocerá y se impondrán multas a los automóviles que entren sin autorización. Las calles mencionadas no sólo tendrán seguridad en la entrada sino que la salida de los coches también estará controlada, como es el caso de Molina Lario en donde ya han sido colocados puntos de control.
El municipio de Movilidad contempla la concesión de 15 mil autorizaciones para automóviles de los cuales, 3 mil serán de los vehículos ya censados en el Centro y los demás a vehículos de carga y descarga, así como servicios municipales, taxis, minusválidos y aquellos que realicen su solicitud por alguna necesidad concreta. Los vehículos de carga y descarga podrán entrar siempre y cuando cumplan con un peso no mayor a 3.500 kilos y únicamente podrá ser en dos franjas horarias que aún quedan por determinar. Aquellos automóviles que pertenezcan a residentes podrán aparcar por la noche en los lugares asignados, mientras que durante el día éstos será para el uso comercial.
El acceso se solicitará por medio de los interfonos y una vez autorizada, se bajarán los pivotes que estarán dirigidos por los interfonos. A su vez, las cámaras grabarán las matriculas de todos los que entren en las calles y se impondrán multas a todos los vehículos que no se estacionen en el lugar que les hay sido concedido.