Cómo elegir uniformes empresariales
Las empresas saben perfectamente lo que implica tener un uniforme para que usen los trabajadores ya que se ve traducido en beneficios para la empresa y la marca; desde la apariencia más heterogénea hasta un sentido de pertenencia que ayuda a los empleados a tener un mejor desempeño. Muchas empresas no se han dado cuenta de los beneficios que les puede traer el uniformar a su personal con prendas que a todos les convenga.
¿Por qué decimos que a todos les convenga? Sencillamente es característica de un buen líder escoger siempre lo que no solo a él le beneficie, sino que logre llegar a acuerdos con sus compañeros de trabajo; un líder ve en sus trabajadores un equipo, no a subordinados, ya que desde el guardia de seguridad hasta el CEO hacen posible que una empresa sea grande.
En cuanto a los uniformes empresariales debemos tener en cuenta que la prenda debe ser cómoda y del gusto de quienes lo van a usar; si bien no podemos darle gusto a todos, sí debemos hacer un consenso en donde puedan expresar sus preferencias y sugerencias personales.
Otra cosa que tenemos que cuidar al momento de mandar a hacer los uniformes es que no todos nuestros trabajadores tienen la misma talla ni las mismas necesidades corporales; no podemos hacer un uniforme unisex, ya que puede venirles muy bien a los hombres y a las mujeres no o viceversa. Este punto va más allá del aspecto, ya que un uniforme que le quede chico o grande a nuestro trabajador, puede comprometer su desempeño en el trabajo.
Prendas laborales que se adecúen tanto a las condiciones climáticas como a las estaciones del año han resultado en grandes beneficios. Cuando los trabajadores cuentan con uniformes que los protegen del frío, del viento o que les da frescura en tiempos de calor, es un uniforme que pueden utilizar más allá de sus horas laborales; pueden llevar una buena chamarra a un evento familiar, una gorra a un día de playa, una playera cómoda para ir al zoológico, etc.
El paso del tiempo causa deterioro en las prendas; tomando en cuenta el tipo de trabajo que realicen también, debemos considerar el hacer uniformes con textiles resistentes que aguanten las lavadas para que así no tengamos que estar re abasteciendo a nuestros trabajadores con un uniforme nuevo cada vez que el actual se les deteriore.
Al elegir el uniforme, es importante conocer el puesto para quien se va a asignar, es decir no se dará el mismo tipo de uniformes ejecutivos, que requieren corbata, suéteres formales, sacos o faldas a un trabajador que está al aire libre o bajo condiciones extremas, requiriendo con su uniforme un plus que le de seguridad, como un impermeable, un rompevientos o un chaleco.
No debemos considerar una pérdida de tiempo el negociar con nuestros trabajadores; esto nos ayudará a conocer mejor sus necesidades y tomar mejores decisiones.