Empresas mexicanas luchan por combatir el hambre
Hoy en día uno de los asuntos que más ocupan las agendas internacionales y nacionales de millones de empresas y organizaciones es el problema de la hambruna. Por ejemplo, en lugares como Somalia este problema ha terminado con la vida de 260,000 personas en tan sólo dos años; desafortunadamente, una gran parte de quienes mueren de hambre son niños, se calcula que de las 260 mil personas muertas en esta zona, alrededor de la mitad eran niños menores de cinco años.
En México se ha llegado a decir que la hambruna mata más que el narco, puesto que en los últimos diez años, de acuerdo con el Centro de Estudios e Investigación en Desarrollo y Asistencia Social (CEIDAS), basado en datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el número de personas fallecidas por hambre alcanzó los 85 mil 343 mexicanos, en tanto que las muertes a causa de los enfrentamientos armados dieron un total de 49 mil 804.
Por este motivo un conjunto de empresas mexicanas socialmente responsables han unido fuerzas para trazar un plan que ayude a combatir el grave problema del hambre en este país. Este grupo de empresas conformadas por Bibliotecas Hermanas uniendo fuerzas con que Debra Ortiz y Judd Wheeler, representados por Hilarious Givers; Gregorio Rosas, director de Surrendered Ministries, con Wayne & Carol Kiger-Rice de Voice of Bride Ministries, Jóvenes sin Fronteras coordinados por Arantza Fernández y otras, entregarán cada año aproximadamente 100 toneladas de alimentos con el fin de apoyar a grupos en situaciones de vulnerabilidad.
Los esfuerzos coordinados de estas empresas buscan incrementar el alcance de esta solución implementando un plan de trabajo en el que Hilarious Givers reunirá en su almacén de Estados Unidos los alimentos donados para luego enviarlos a México. Desde ahí será distribuidos a cocinas y desayunadores que, a su vez, estarán administrados por organizaciones civiles que busquen apoyar a grupos vulnerables.
Por su parte, Bibliotecas Hermanas se encargará de donar alimentos, capacitar y equipar con elementos de cocinas industriales a las organizaciones civiles que se encarguen de ofrecer comida niños, mujeres y hombres vulnerables.
Por último, Jóvenes sin Fronteras animarán a los jóvenes de México a que participen como voluntarios en la entrega de despensas, la preparación de comidas y la atención a los desayunadores y cocinas que formen parte de este proyecto que tiene como principal objetivo enfrentar el problema del hambre en México.