Instalación de techos convenientes para soportar climas calurosos
Uno de los nuevos usos que se le está dando al falso plafon es el de su aplicación en la instalación de techos, debido a su capacidad ergonómica, la cual permite al material adaptarse a las condiciones de un lugar, sacándole el mayor provecho al acero del que está hecho bajo climas calurosos, pues la durabilidad del material es casi eterno.
El material suele emplearse dentro del ámbito de la herrería, pisos, filtración, elaboración de jaulas y plafones u otras estructuras que también suelen utilizar la criba como material alterno, pues también está hecho de acero galvanizado entretejido, que a su vez, también es empleado por el ámbito decorativo de casas, seguridad para animales o por el sector que brinda seguridad a los inmuebles.
La idea provino a partir de que el falso plafon estaba siendo utilizado para la elaboración de bancas para parques y jardines en exteriores, que fueran capaces de soportar todo tipo de climas, sin que éste presentara un desgaste significativo y que durara el mayor tiempo posible, pues al ubicarse en espacios públicos, estos necesitaban ser del mayor provecho posible.
El material se probó y se construyeron las primeras estructuras que fungirían como techos capaces de soportar principalmente los climas calurosos, pues además de proteger parcialmente de la luz Solar a quienes pasaran por debajo de él, la naturalidad del material provee asimismo una libre circulación del aire, lo que lo hace una excelente opción para ser implementado en lugares públicos de gran movilidad, tales como centros comerciales o museos.
Ahora bien, si el diseño simple quiere ser escondido o complementado con otro más, lo que se puede hacer es instalar además techo falso y utilizar la malla como soporte, posibilidad que mantendría las cualidades antes mencionadas del producto final, las cuales lo hacen el material base ideal para la instalación de techos durante el verano, pues la circulación del aire sigue siendo posible.
Si se compara el falso plafón con el material que suele emplearse para la instalación de techos en verano, tales como las láminas o el vidrio, se puede ver claramente que ante ellos el falso plafon o la malla de criba, presentarían la ventaja de la máxima durabilidad por tratarse de acero, y segunda de la aclimatación y adaptabilidad del material bajo cualquier sistema.
Sobre una solución u otra, se recomienda realizar un análisis sobre las ventajas y desventajas entre uno y otro, y medir el alcance de nuestras acciones, para determinar si, por ejemplo, el tema de lo económico tendría que determinar la elección del material.