¿Por qué utilizar un andamio en la construcción?
La industria de la construcción es una de las que más presentan accidentes debido al riesgo potencial que representa trabajar a alturas elevadas, el empleo de maquinaria pesada, el manejo de herramientas que deben utilizarse con cuidado –rotomartillos, mezcladoras, sierras eléctricas, etcétera—, uso de pinturas y solventes y, en fin, un sinnúmero de otras condiciones que encierran cierto peligro cuando no se toman las medidas precautorias convenientes.
Es por ello por lo que, para evitar cualquier tipo de incidente, desde los más nimios hasta los verdaderamente catastróficos, es recomendable utilizar el equipo adecuado para salvaguardar la integridad de los trabajadores y hacer, a la vez, que su labor sea más sencilla y eficiente.
Ejemplo de esto es el uso de andamios en la construcción, ya que estos permiten que albañiles, ingenieros y demás personas involucradas en el proyecto cuenten con un espacio apropiado de trabajo para laborar de forma cómoda y segura, evitando el uso de escaleras de tijera y de mano con las cuales no se tiene el mismo grado de movilidad y, además, son muy susceptibles a caídas.
Así, los andamios tubulares son imprescindibles en edificaciones de gran envergadura, pues su constitución robusta, firme y estable aporta un buen grado de seguridad mientras se manejan diversas herramientas de trabajo a grandes alturas, labores de albañilería y pintura, o simplemente para la limpieza final de la fachada del inmueble construido.
Otra opción también viable, aunque para obras a menor escala, son los andamios multidireccionales, los cuales cuentan con un sistema de ensamblaje que permite adaptarlos a diversas condiciones. Escaleras, barandales y soportes pueden ser rápidamente fijados para montar una estructura ligera pero sólida, haciendo que el área de trabajo sea de fácil y cómodo acceso.
Aunado a todo esto, los andamios de este tipo representan una solución económica y eficaz, ya que existen en diversos tamaños y números de piezas en respuesta a las necesidades particulares de cada proyecto.
Cabe mencionar que cualquiera de estas dos estructuras puede adquirirse o rentarse según sea la frecuencia o el tiempo de construcción, además de que, por lo general, cuentan con certificaciones y especificaciones reguladas que garantizan su buen desempeño.
Si aún tiene duda entre cual de estas dos soluciones es la más conveniente para su proyecto arquitectónico o de ingeniería, le recomendamos que acuda con un proveedor que pueda ofrecerle la orientación que requiere y que cuente con andamios certificados, ya que de lo que estamos hablando es de la seguridad de sus trabajadores y esto nunca debe tomarse a la ligera.